En esa estructura se instalarán las dos calderas de la Central.
Tomado de Diario Libre
SANTO DOMINGO. La construcción de las
dos plantas a carbón que se ejecuta en Punta Catalina, Baní, “en los
próximos meses entra en una etapa de cambios fuertes y acelerados”,
afirma José Rafael Santana, presidente del Consejo de Administración de
la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
El funcionario, sentado al lado de Rubén
Bichara, vicepresidente ejecutivo de la CDEEE, le habla a un grupo de
editores de economía de diversos medios de comunicación, que este jueves
visitaron la zona de construcción de la central a carbón.
Revela que “dentro de corto tiempo”
empezarán a llegar los importantes equipos, cuya construcción ha sido
encargada en el extranjero, y que son vitales para la puesta en
funcionamiento de la central.
Se refiere a los equipos y materiales de
las turbinas y calderas de las unidades que constituirán la Central
Termoeléctrica Punta Catalina, que se espera que comenzarán a llegar al
país el mes de mayo, lo que permitirá el inicio de su montaje varias
semanas después.
Además, Rubén Bichara agrega que la
CDEEE, el consorcio constructor, la General Electric, a cargo de la
Turbina, y la Babcock and Wilcox, que construye la caldera, han
organizado el calendario de transportación de los materiales del
edificio de la caldera número, uno para realizarse entre mayo y octubre.
Luego, entre agosto y noviembre, llegarán las partes para el edificio
correspondiente a la caldera número dos.
Las partes de trabajo a presión de las
calderas y sus equipos auxiliares serán los próximos en llegar, así como
las turbinas y los generadores que serán transportados hacia el país
entre finales de 2015 y el primer trimestre de 2016, explicó el
ejecutivo.
Sustentándose en estos avances, el
vicepresidente ejecutivo de la CDEEE afirma con seguridad que la primera
planta de la central comenzará a operar en el 2017, como se ha
previsto, y la segunda planta lo hará dos meses después.
Cuando eso suceda, el país contará, en
términos brutos, con 720 megavatios adicionales al actual parque de
generación de electricidad.
En la obra, hasta la fecha se han
gastado US$600 millones, de los cuales US$300 millones fueron aportados
directamente por el Gobierno. Mientras que los restantes US$300 millones
fueron obtenidos a través de Consorcio Odebrecht-Tecnimont-Estrella,
que construye la central a carbón. Este préstamos fue obtenido en la
banca local y contó con el aval del Estado dominicano.
Pero la inversión realizada hasta la
fecha es mayor, pues se han ejecutado trabajos pendientes de pago por un
monto estimado entre los US$270 millones y US$300 millones, revela
Santana.
“Esto nos coloca en un grado de
inversión, entre lo sufragado y lo pendiente que estaría montando entre
los 750 millones a 900 millones de dólares, al día de hoy”, explica.
A esto se le agrega que el 7 de abril
pasado, el Gobierno introdujo al Senado de la República el contrato de
préstamo por US$656 millones, suscrito el 10 de febrero pasado entre el
país, el Banco Nacional de Desemvolvimiento Económico y Social (BNDES) y
la constructora Odebrecht.
Queda un financiamiento pendiente. En
abril de 2014, el Ministerio de Hacienda informó que la agencia de
crédito a la exportación italiana (SACE) había garantizado un
financiamiento de alrededor de US$500 millones para la construcción de
la central a carbón.
Según Bichara, este préstamo ya ha sido
aprobado por el directorio de esa entidad, y se tiene previsto que en
menos de 60 días se introduzca al Congreso para su aprobación.
“Se le esta dando la forma para
someterlo al Congreso. y tiene una diferencia entre uno y otro que no
supera los 60 millones de dólares”, explica.
El total de esos dos financiamientos
será de US$1,250 millones, “en con condiciones muy blandas”. Tendrán
trasas de 4% a 4.5%, y plazos de largo plazos, superioriores a 10 años,
según Bichara.
Un recorrido por el área en que se
construye la central permite observar significativos avances. Lo que
hace menos de un año era un amplio terreno nivelado que se extendía como
una sabana ante los ojos, en la actualidad es una zona de activa
construcción. Las bases para las calderas se aceleran, y el puerto que
recibirá los barcos panamax que traerán al país el carbón, se dibuja con
fuertes trazos en el horizonte costero de la zona.
La Central a Carbón es un hecho que emerge aceleradamente en Punta Catalina, de Baní.
Estado administrará la Central
Al dia de hoy, se estima que la Central a
Carbón de Punta Catalina tendrá un costo final y total para el país de
US$1,945 millones. Ese es el valor original, que “como mucho” no debería
exceder un 5% a 7%, afirma José Rafael Santana. Asegura “que se han
amarrado todos los cabos”, lo que hace imposible un imprevisto de mucha
importancia . Una vez entre en operación, su administrador será el
Estado, aunque se licitarán al sector privado los trabajos de operación y
mantenimiento.